lunes, 1 de abril de 2019

EL ESTRÉS Y LA VIDA SALUDABLE

       
   
  El estrés: estado de cansancio mental provocado por la exigencia de un rendimiento muy superior al normal; suele provocar diversos trastornos físicos y mentales y causar problemas de salud o empeorarlos si  no se aprenden formas para manejarlo.

 El estrés tiene responsabilidad directa o indirecta en muchas enfermedades de la vida : hipertensión arterial, enfermedades del corazón y el aparato digestivo, trastornos de la piel, síndrome de fatiga crónica, asma bronquial, cefaleas y migrañas (dolores de cabeza), depresión, insomnio son algunas de ellas. También se le atribuye un rol muy importante en las defensas del organismo lo que podría se un coadyuvante en el desarrollo de enfermedades
inmunológicas y cáncer.

      Algunos de estos síntomas pueden ser señas de que estas padeciendo estrés
Ansiedad
Dolor en la espalda
Estreñimiento o diarrea
Depresión
Fatiga
Cefalea o dolores de cabeza
Aumento de la Tensión Arterial
Insomnio
Problemas en sus relaciones con los demás
Sensación de "falta de aire"
Tensión en el cuello
Intolerancia a las comidas, flatulencia, acidez.
Aumento o disminución del apetito.

Para llevar una vida saludable y controlar el estrés es necesario los siguientes consejos:

  Mantener una alimentación correcta que aporte un equilibrio nutricional al organismo con suficiente ingesta de hidratos de carbono, lípidos, proteínas minerales y vitaminas.

   Practica continua física de deporte para fortalecer músculos, huesos, potenciar el corazón , mejorar la circulación sanguínea, relajar la mente y quemar calorías. Puede ser un relajante paseo o un entrenamiento que te haga sudar, el deporte te pondrá de mejor ánimo y permitirá a tu cabeza descansar por unos instantes.



   Establecer prioridades, y no te preocupes de las cosas que no se pueden controlar, como por ejemplo el clima. Escribe en un papel o agenda electrónica aquello que te preocupa tanto, es la mejor forma de visualizar los problemas y trazar un plan para resolverlos.

   Intenta ver los cambios como algo positivo y no como una amenaza. Pedir ayuda a los amigos o familiares y, cuando sea necesario, dirigirse a profesionales. Y cuando las cosas se tuerzan intenta sonreír, un simple gesto que puede reducir la tensión y mejor tu respuesta al estrés.

   Apóyate en tus seres queridos. Pídeles ayuda si crees que la necesitas, y no finjas que estás bien, porque  te puede provocar más ansiedad todavía. De hecho, alguien de tu alrededor puede entenderte mejor y quizá compartir tus mismas sensaciones.

   Aprende a relajarte. Una forma de relajación: recostarse sobre una superficie plana, colocando una mano sobre el estómago, y la otra en el pecho. Inhalar aire al mismo tiempo que el estómago se hincha, y exhalarlo mientras el estómago baja. Hazlo de forma lenta, repetir mientras lo haces, una frase a modo de mantra (frase  que se recita para apoyar la meditación). La palabra o frase deben estar cargadas de un significado especial que dirigen tu energía y tu intención para alcanzar tus metas personales o profesionales.
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Desconectate con música. Ponerte unos audífonos o subir el volumen de los altavoces mientras cierras los ojos puede ser una gran opción para desconectar del estresante mundo que nos rodea y disfrutar de los poderes de una buena sinfonía relajante.

Salir al aire libre y respirar aire puro puede ayudarnos a poner las cosas en perspectiva. Si además aprovechas para practicar alguna actividad o incluso olfatear el aroma de alguna planta da efectos calmantes, como la lavanda.




Dormir menos de ocho horas o las horas mínimas para que tu organismo descanse,puede hacer que
tus nivel de cortisol se disparen, si mejoras  tu descanso o tomas siestas puedes reducirlos.
El buen dormir genera energías para el desempeño de las tareas del día a día. No te automediques, ni para relajarte ni para dormir.

Una buena salud sexual es cardiosaludable y relaja nuestra mente.

Prevenir en lo posible accidentes domésticos, laborables y de tráfico.

Evitar el consumo excesivo de alcohol, drogas de abuso, medicamentos y tabaco que son perjudiciales para la salud.







RECUERDA REALIZAR TODAS LAS ACTIVIDADES QUE TE AYUDARAN A CONTROLAR EL ESTRÉS, SI TE SIENTES MUY AGOBIADA PUEDES BUSCAR AYUDA PROFESIONAL.
ALIMÉNTATE BIEN, DESCANSA Y PRACTICA EJERCICIO.