La .adolescencia es un periodo en el cual se producen profundos e importantes cambios biológicos y psicológicos diferentes según la edad. Es una etapa donde la comunicación y orientación sexual por parte de los padres y familiares es de suma importancia, ya que estar ausente hace que ellos busquen información desviada en la calle con sus amigos o en las redes y esto los conlleva a tener relaciones sexuales a muy temprana edad sin protección, exponiéndose a embarazo precoz y enfermedades de trasmisión sexual.
Las infecciones de trasmisión sexual constituyen un importante problema de salud en la población adolescente, el 50% aproximadamente ocurren a esta edad. Los casos de VPH específicamente son más altos en la población adolescente presentándose hasta en un 82%.
Los adolescentes y jóvenes están expuestos a factores y conductas de riesgo que son los elementos que los hacen más vulnerable a la infección por VPH. El mayor riesgo de
adquisición del VPH se relaciona con el inicio temprano de las relaciones sexuales (el VPH ingresa por microlesiones en la piel durante el acto sexual), el elevado número de parejas sexuales a lo largo de la vida, el cambio frecuente de parejas sexual, no uso del condón, el contacto sexual con una persona promiscua y las razones biológicas de inmadurez del cuello uterino y déficit del flujo cervical protector.
adquisición del VPH se relaciona con el inicio temprano de las relaciones sexuales (el VPH ingresa por microlesiones en la piel durante el acto sexual), el elevado número de parejas sexuales a lo largo de la vida, el cambio frecuente de parejas sexual, no uso del condón, el contacto sexual con una persona promiscua y las razones biológicas de inmadurez del cuello uterino y déficit del flujo cervical protector.
En ocasiones no es necesario el coito para la transmisión del virus ya que esto puede ocurrir a través de los dedos y juguetes sexuales, por lo tanto si los adolescentes tienen prácticas sexuales de este tipo, aunque usen preservativo se puede contagiar la piel no protegida por este.
De esta manera los adolescentes sexualmente activos estarán expuestos a contagiarse por el VPH y a sus consecuencias que van desde la infección latente (asintomática), hasta la aparición de verrugas genitales y lesiones con alteraciones celulares atípicas en los tejidos de los genitales. La mayoría de las infecciones en ambos sexos son asintomáticas y por acción del sistema inmune la infección e incluso las alteraciones celulares atípicas desaparecerán, pero en un pequeño porcentaje la infección persistirá y podría evolucionar, aumentando el riesgo de cáncer.
De esto se deriva la necesidad de que las mujeres adolescentes sexualmente activas, deben seguir un control ginecológico, con el objeto de detectar infecciones de transmisión sexual. Se recomiende el uso de preservativo durante la relación sexual, aunque no previenen todas las infecciones podrían disminuir la cantidad de virus transmitido, prevenir infecciones persistentes y aumentar la regresión de la enfermedad.
Por último pero no menos importante la educación para la salud orientada a la salud reproductiva tanto en la consulta médica y en la escuela con la colaboración del docente, informando sobre el VPH, los riesgos asociados a la infección y haciendo hincapié en la prevención.
RECUERDA CONSULTAR A TU GINECOLOGO LAS DUDAS QUE TENGAS SOBRE ESTA INFORMACIÓN-
SE RECOMIENDA LEER LA INFORMACIÓN REFERENTE A LA INFECCIÓN POR EL VPH PUBLICADA EL 25 DE ABRIL DE 2015.