El cáncer de cuello uterino es una causa importante de morbilidd y mortalidad en la mujer. La edad media de aparición son los 54 años, pero en las últimas décadas cada vez es más frecuente en mujeres jóvenes
Hoy en día se piensa que la mayoría de los casos de cáncer de cuello uterino están relacionados con la actividad sexual.
Las mujeres que inician la vida sexual antes de los 16 años tienen dos veces más posibilidad
de padecerlo y aquellas con el primer embarazo muy joven.
Mujeres que tienen múltiples compañeros sexuales tienes igualmente más posibilidad de tener cáncer de cuello uterino.
Es bien conocida la relación del VPH y las lesiones premalignas denominadas neoplasias intraepitelial del cuello (NIC), que no son más que las lesiones que si se dejan evolucionar, pueden transformarse en cáncer. Por lo general esta evolución es lenta en el tiempo.
En los estadios tempranos desde el punto de vista clínico suelen ser asintomáticos (no presentan síntomas).
- Sangrado genital irregular y casi siempre provocado por las relaciones sexuales.
- Secreción vaginal de color rojo claro “como agua de lavar carne” y en los casos muy avanzados puede ser fétida y purulenta.
- El dolor en el abdomen puede ser muy variado y puede aparecer en la región lumbar.
- Los trastornos urinarios y rectales también suelen aparecer en los estadios avanzados y se puede presentar orina con sangre, síntomas de infección urinaria, sangrado rectal y trastornos en el transito intestinal.
La prioridad es realizar el diagnóstico precoz, debe realizarse en la fase de las lesiones premalignas (NIC). O cuando la invasión comienza a manifestarse.
La prevención primaria consiste en evitar los factores de riesgo , basándose fundamentalmente en cambiar los hábitos de vida y, de forma especial, el comportamiento sexual.
La utilización de preservativos, sobre todo en mujeres que comienzan sus relaciones sexuales en la adolescencia o que tienen varios compañeros sexuales, constituye una medida que reduce la posibilidad de padecer cáncer de cuello uterino.
En la actualidad existen programas de vacunación en muchos países, ya que se ha desarrollado una vacuna contra el VPH, que al evitar este tipo de infección, constituiría el mejor método preventivo.
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SI TU CITOLOGÍA PRESENTA ALTERACIONES DEBES CONSULTAR PARA QUE TU GINECÓLOGO TE REALICE LAS PRUEBAS Y LOS ESTUDIOS NECESARIOS PARA DETERMINAR SI ESAS ALTERACIONES ESTÁN O NO RELACIONADAS CON EL CÁNCER DE CUELLO UTERINO.
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